MARÍA ALEJANDRA LUNAR
PUERTO LA CRUZ. En el homicidio del vendedor de comida, Anderson Ramón Núñez Muñoz, de 32 años de edad, que sucedió la madrugada de ayer, el móvil que cobra mayor fuerza es el robo. Este hombre fue despojado de su vehículo tipo Chevrolet Classic, color verde, placa AC7N6UK, además del dinero que había obtenido con la venta de hamburguesas y cadenas.
El hecho transcurrió pasadas las 2:20 am en la entrada de su vivienda, localizada en la calle Margarita del sector Molorca de Puerto La Cruz.
Según lo contado por los familiares de la víctima, quienes se encontraban en la entrada del Senamecf y que no se quisieron identificar, el fallecido estaba con su esposa Marisela de Núñez cuando fue interceptado por cuatro hombres encapuchados.
Presuntamente había un carro encendido en las adyacencias de la casa, situación que le pareció extraño a la pareja, sin embargo, decidieron ignorar el hecho.
Al parecer, Marisela se bajó del vehículo a abrir el portón de la casa cuando fue sometida por los maleantes, quienes portaban armas de fuego y armas blancas, tales como cuchillo. Éstos a su vez se dirigieron hacia Anderson para pedirle sus pertenencias.
“Él no se resistió, entregó todo tal y como se lo indicaron”, comentó un familiar quien a su vez contó que acto seguido, uno de los hombres sacó un escopetín y le disparó en el maxilar de lado derecho, causándole de muerte de forma inmediata.
Los sujetos huyeron con los objetos de valor y el vehículo.
Tal fue la bulla que este hecho causó, que los vecinos salieron a tratar de auxiliarlos y una hermana de Anderson que vive a cuatro cuadras de la escena, se aproximó al sitio, donde ya no se podía hacer nada más que lamentar.
El hombre quien dejó en orfandad a cuatro niñas y un niño, vivía desde hace cinco años en la mencionada dirección.
Detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) hallaron el vehículo la mañana de ayer en un estacionamiento del sector Tronconal V de Barcelona.
A uno de los familiares de la víctima fatal, le causó sorpresa al enterarse de donde los funcionarios consiguieron el carro, que en ese lugar, Tronconal V, vive un amigo de Núñez Muñoz. “No sé si lo vendieron, pero que yo sepa, él no había tenido problemas con nadie”, refirió.
Se conoció que Núñez Muñoz atendía desde hace ocho años dos quioscos de comida rápida en el paseo de La Cruz y el Mar de Puerto La Cruz.
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